de perfectos desconocidos a enamorados...

LA FIESTA

el se la llevo de la fiesta, camino con ella de la mano hasta un jardín grande donde había arbustos, donde había un barranco, se hecho con ella a ver el cielo, le dijo que quería quedarse ahí hasta el día siguiente, ella accedió.
hablaron sobre lo que hacían en el día, compartieron sus historias, se hicieron bromas, se acurrucaron, se hicieron cosquillas el uno al otro.

- Tavata...
- que?
- quiero qe nos veamos todos los días, no solo esta noche, quiero ver todos los amaneceres contigo, verte juguetear en mis ojos, acurrucarte, escucharte, abrazarte, tocarte, fumarme tu aliento, jugar con tu pelo.
- eres muy lindo, yo tampoco quiero que esto se quede en solo esta noche.
- a que le temes?
- a todo, sabes...? me da miedo volverme a enganchar con alguien...
- piensas que te haré dano verdad?
- no es eso...
- entonces? dime que es... quiero saber.
- me da miedo hacerte dano a ti.
- porque me dices eso?
- debe ser porque existen cosas que escapan de mi control, cosas que tal vez yo misma he provocado...
- eres un alma libre, nadie puede obligarte a nada. yo solo quiero estar contigo todo el tiempo que nos sea posible. dame una oportunidad.
- la tienes, que crees que hago aquí?
- lo se, pero...
- pero...?
- quiero que seas mi novia.
la chica se quedo muda, no le quito la vista de los ojos, le mantuvo la mirada, se ruborizo como hacia tiempo no lo hacia; ese chico realmente le gustaba, ese chico la hacia reír de verdad, la hacia sentir viva, la hacia sentirse cursi.
- espera, creo que estoy yendo rápido, lo siento, no quiero que te asustes, quiero quererte, verte sonreír.
- ahm... yo...
- tranquila,no tienes que contestarme ahora, o igual sigo queriendo todo contigo. quiero hacerte el amor, caminar contigo por el parque, amanecer a tu lado, hacerte bromas, perderme en tus ojos.
- vaya... es es mucho -dijo la chica mientras jugueteaba con el pelo enrulado del muchacho.
- es cierto... -dijo el mientras pasaba sus dedos por las mejillas de su chica.
los dos se miraron por unos instantes eternos, se acercaron juntando sus narices como en un beso esquimal, se quedaron viéndose a los ojos por un largo rato, las manos de el recorrieron la espalda mientras los dedos de ella dibujaban figurillas en su cuello... ambos se entregaron al otro en un beso largo, suave, profundo, dulce, tierno, sin malicia, puro.
se quedaron abrazados, hasta que el sol salio, ella dijo que debía irse, pero en lugar de eso se fue con el a su apartamento, no hizo falta que el insistiera mucho, ella realmente quería quedarse con el y así lo hizo.

llegaron al apartamento de el, hubo un silencio prolongado, ella tenia los zapatos de taco en la mano, los dejo en el suelo y se seto e el sillón mas grade de la sala, el le trajo el desayuno, ella le agradeció y comió con el, después de eso, el le ofreció su recamara, por si ella quería descansar, ella accedió, pues realmente estaba cansada, pero le pidió que se quedara a su lado. entraron a la habitación, que estaba un poco desordenada, se recostaron en la cama, se abrazaron, se acariciaron, se descubrieron el uno al otro... se hicieron el amor, se abrazaron, se besaron, se tocaron, se miraron... se entregaron.
ella se quedo dormida en los brazos de el, ninguno se levanto hasta la manana siguiente. tomaron desayuno juntos, se despidieron, con la esperanza de volver a verse pronto.